Pinceladas Esther

Pinceladas Esther
La riqueza de cada casa está en la capacidad de sus habitantes y de dejarnos sorprender por la vida, cada situación requiere esfuerzo. Abrir cajar y armarios siempre remueve la historia compartida y prepara para lo que está por llegar.

martes, 28 de marzo de 2017



En este 502 cumpleaños de Teresa de Cepeda y Ahumada, agradecer su vida y todo lo que nos legó.
Con este "Nada de Turbe" que tantas veces nos acompaña a muchas personas para sentirnos profundamente acompañadas por el Dios que todo lo es.

Teresa se sintió profundamente amada y acompañada por Él y es lo que nos ha querido transmitir, más allá de otras muchas cosas que nos legó, su mensaje principal para hoy es que la misericordia de Dios es infinita. 

"Nunca se cansa de dar ni se pueden agotar sus misericordias; no nos cansemos nosotros de recibir" (V 19, 15)


"Sólo Dios basta"

¡Felicidades Teresa!

martes, 21 de marzo de 2017



"Si Conocieras el Don de Dios"

Hay relatos que uno oye una y otra vez, pero de repente, hay un momento en que algo le hace poner atención en esa historia o mejor dicho, en lo que ha resonado en el interior.

Fue el otro día escuchando el texto de la Samaritana que se lee el tercer domingo de cuaresma, conocido texto y porque no, trabajado. 

Jesús cansado del camino se acerca a un pozo en Sicar, allí hay una mujer, samaritana, que va a buscar agua. Jesús le dice “dame agua”, con una petición tan simple y más estando al lado de un pozo, se inicia un proceso de conversión de aquella mujer, ella vivía de espaldas al gran don y mantendrán una larga e interesante conversación.

Las palabras que acaban abriendo los ojos y el corazón de aquella mujer son "Si conocieras el don de Dios".

Quizás estaría bien sentirnos "samaritana", sí, intentar escuchar con el corazón las palabras que Jesús nos dice para llegar a "Conocer el don de Dios" en nuestra vida, y, para que lo reconozcamos cada día.

Dejemos que la palabra de Dios, muchas veces en boca de algún hermano con sed, transforme nuestro corazón y nuestra vida.

                                                                                                             

martes, 14 de marzo de 2017




"Hay que volver..."
Si, no podemos quedarnos en nuestra comodidad, en nuestra zona de confort, para vivir y hacerlo de verdad y en profundidad uno ha de volver.
¿Volver? ¿Volver a donde? ¿Volver a qué?...
Volver a retomar la vida, con todo lo que ella comporta, volver a abrazarla con todas nuestra fuerzas, volver a saborear cada instante...
Volver a hacer lo que sea pero volver con las ganas de hacer brillar cada instante y de que nuestra presencia no sea neutra.
Volver para dejar huella, para que aquel con el que nos crucemos no se vaya igual que vino.
Volver con ganas, con muchas ganas de trabajar para que mañana sea distinto, si puede ser algo mejor.
Volver... del Tabor siempre hay que volver.

lunes, 6 de marzo de 2017



"Mas, como es tan bueno, no nos fuerza, antes da de muchas maneras a beber a los que le quieren seguir, para que ninguno vaya desconsolado ni muera de sed. Porque de esta fuente caudalosa salen arroyos, unos grandes y otros pequeños, y algunas veces charquitos para niños, que aquello les basta, y más sería espantarlos ver mucha agua; éstos son los que están en los principios.
Así que, hermanas, no hayáis miedo muráis de sed en este camino. Nunca falta agua de consolación tan falto que no se pueda sufrir." CP 20, 2

En este inicio del tiempo que vivimos, un tiempo en que se nos invita a parar, a contemplar especialmente cómo nos situamos, como leemos nuestro día a día para poder vivirlo más a fondo, para que cuando llegue el momento de celebrar, seamos conscientes de lo vivido y del camino recorrido.
Me llegó este texto de Teresa de Jesús, que les dice con gran pedagogía a sus hermanas que han de vivir sin miedo porque han de saberse amadas en la profundidad y en la justa medida que cada una de ellas puede admitir y disfrutar, ni en poca ni en demasía.
Justas palabras en un tiempo incierto, en el que el miedo puede apoderarse de uno y por ello, no encontrar el agua necesaria, que seguro está , porque "no nos fuerza, antes da de muchas maneras de beber" pero eso sí a los que quieren recorrer el camino.
Me inspira pensar que también nosotros hemos de ser agua para el sediento pero hoy, sé que lo que toca sentir y vivir es saber que hay un arroyo, fuente, ... o charquito para cada uno en el camino que recorremos. Pero hay que estar atento a no pasar de largo.
Saber disfrutar de todo lo que la vida nos da.